CATALINA CHAVANNE

¿Cómo fueron los primeros años?
Arrancamos en un showroom en un séptimo piso, y manejándonos solamente con Facebook (aún no era el auge de Instagram). La primera temporada hicimos 300 prendas: las vendí todas. La segunda hice 600 y me pasó lo mismo. Empecé a sentir que pasaba algo con la marca porque me preguntaban mucho por Facebook si hacíamos venta mayorista. Percibí que había un nicho que podíamos encarar. Nos mudamos a otro showroom en Ugarteche y Seguí, un edificio de techos altos, con piso de madera, de estilo francés... Y ahí dimos nuestro primer salto lanzando por primera vez venta mayorista y aparte, la primera colección de verano.

¿Qué es lo más importante de una marca de ropa?
Considero que cada proyecto debe considerar a cada eslabón de la cadena, el del taller, el que te da la materia prima, el empleado interno de la marca, el empleado externo, las clientas, y uno mismo, porque todos nos nutrimos de lo que hacemos y de las experiencias que vivimos y eso lo podemos trasladar para bien o para mal a la marca.
 

¿Cómo definirías a Blue Sheep?
Tiene algunas características que la definen. 

• Es un producto nacional, diseño argentino. 
• Hacemos prendas de calce oversize o que podés adaptar a tu propio cuerpo: podés cambiarle la morfología con un cinturón o un accesorio. 
• Le damos recursos a la clienta sobre cómo usar las prendas cuando vienen al showroom. Los tutoriales son herramientas clave.
• Trabajamos una variedad de talles que es cada vez más amplia, este aspecto lo hemos tenido presente antes de que saliera la Ley de Talles. 
• Nuestra paleta de color es súper variada. 
• El apoyo a todo lo que es el trabajo artesanal. Recurrimos a algunas comunidades que trabajar técnicas ancestrales como el tejido chaguar o los tejidos a mano hechos en el norte del país
   

¿Cuál fue tu experiencia con la pandemia?
Quise apostar a las ventas en el interior del país, para ello creamos una página web. Laburamos con una plataforma internacional y haber tenido esta página ya desarrollada cuando arrancó la pandemia fue un factor fundamental.
Cuando arrancó el covid tuve dos semanas donde yo observaba las marcas y no podía entender por qué las marcas seguían como si no pasara nada. Después de mucha reflexión me di cuenta de que la manera de salir adelante con este panorama que era incierto, era acercándonos más.
Siempre fuimos una marca cercana, pero me pareció que era un momento para fortalecer ese vínculo en un tiempo en el que se nos imponía la distancia y la verdad que fue un éxito.

Implementamos algunos detalles como escribirle una carta personalizada a aquellas personas que compraban online y un mensaje por whatsapp agradeciéndoles la compra cuando aún no sabíamos cuándo le podíamos entregar el producto. Significaba muchísimo que las clientas nos compraran en esa situación.
 

¿Cómo es producir en Argentina?
En Argentina tenés algunas limitaciones: lo que hace a la maquinaria, la técnica está más atrasada pero si uno tiene algo de conocimiento puede traspasar ese conocimiento a la gente que trabaja en los talleres. Si sabés qué reforzado le podés dar a un pantalón y lo enseñás, le estás exigiendo un producto mejor y le estás dando un recurso para que él pueda traspasar ese conocimiento.
Tenemos una responsabilidad muy grande los que trabajamos en la industria al tener que exigir pero antes de eso hay que enseñar. Antes de la pandemia se hablaba de producir en China, pero hoy es todo un tema, por ejemplo, importar las telas del mismo lugar, ¿qué pasa si cierran las fronteras?

¿Dónde está el local?
El local principal se encuentra en La Colorada, en Palermo. Este verano, abrimos un nuevo pop-up store ubicado en el complejo La Aldea en Pilar. Lo pensamos como un lugar con estética de playa donde priorizamos la calidad, el diseño y el color de las prendas.

Algunos tips para comprar ropa
Le pedimos a Catalina que nos cuente qué es lo que debemos tener en cuenta a la hora de comprar ropa, especialmente durante los sales. 
 

¿Qué es lo más importante para comprar cuando hay sale?
En tiempos de sale debemos invertir en prendas que se puedan usar en temporadas de transición y que perduren en nuestro ropero.
Te paso cinco opciones de prendas que son una buena opción..

• Una pollera larga: una pollera larga de poplín es ideal para llevar en verano con chatas y un chaleco o camisa blanca. En invierno combinala con un maxi suéter y con botas altas.
• Vestido midi: el vestido midi es una inversión asegurada. Femenino, canchero y súper versátil. En verano lo podés llevar con sandalias o zapatillas y cuando empiecen los días de más frío, combinarlo con botas y un blazer sobre los hombros.
• Camisa con lazo: la camisa es un ítem básico que nunca puede fallar. Es una prenda comodín y se adapta a los looks de verano e invierno. Animate al color y llevala con bermudas o con un pantalón de cuero.
• Cropped pant: los cropped pant fueron los reyes indiscutibles la temporada pasada y lo van a seguir siendo. Son buenísimos para levantar un look.
• Blazers: invertir en un blazer es una de las mejores elecciones. Son clásicos, elegantes y muy cancheros. Se adaptan a cualquier situación y estación y su poder de estilismo es inigualable. Se llevan con jeans, con pantalones sastre, con polleras o bermudas. Sus usos son múltiples y logran hacer que tu look se vea sofisticado tanto para una jornada laboral como para una salida más informal.