MARÍA COLL ARTE

Pinceles de todos los tamaños, óleos, acrílicos, acuarelas y bastidores son algunos de los elementos que invaden la casa de María. Es que el dibujo y la pintura la acompañan desde siempre. No recuerda exactamente desde cuándo, porque siente que llegó a ella casi sin darse cuenta. “Es una actividad que me transporta, me abstrae y que disfruto muchísimo”, nos cuenta mientras prepara su mesa de trabajo.

María Coll Arte arrancó como un hobby. Los momentos que María le dedicaba a la pintura eran el tiempo más disfrutado. Y fue su familia quien la ayudó a despertar ese sueño que estaba latente. “Ellos me fueron abriendo este camino sin fronteras. Aunque tengo un reconocimiento especial para mi maestra y guía, Cecilita Cornejo Patrón. Ella me enseñó todo lo que sé y con el talento de quien enseña con libertad y entusiasmo”, reconoce María agradecida.

Las acuarelas esperan su turno para entrar en acción. Los pinceles están a punto de empezar a bailar sobre las que pronto serán unas increíbles estampitas de Comunión. Es que hace un tiempo, por encargo de una amiga, María incursionó en una temática muy especial: ilustraciones de vírgenes y ángeles. "A partir de esos dibujos, empezaron a encargarme estampas de Bautismo y Comunión. Las hago a mano, una por una, y lo disfruto muchísimo. Es un trabajo que me llena el alma de la belleza de Dios", cuenta María a pura emoción.

María Coll Arte es especialista en rostros y figuras humanas, pero también realiza cuadros de paisajes y flores. En cuanto a la técnica, casi siempre utiliza acuarela, pero a veces se inclina por óleo y pastel. Verla trabajar es maravilloso. Detallista y creativa, le pone amor a cada pincelada. El mismo amor que sentimos nosotras al disfrutar de su trabajo terminado.

Lo que nos encantó: Los cuadros de coyitas nos enamoraron. Ternura y color en una sola imagen.