EL CORTIJO HOTEL BOUTIQUE
01-03-2019 | El hotel se instaló en una auténtica casa de pueblo, con patios y balcones coloniales que miran al nevado de Cachi: guardián de esta aldea del 1700.
Un enclave que fusiona el diseño contemporáneo con la arquitectura colonial
El hotel se instaló en una auténtica casa de pueblo, con patios y balcones coloniales que miran al nevado de Cachi: guardián de esta aldea del 1700.
La estructura mantiene su estilo con gruesas paredes de adobe, tejas coloniales y pisos San Carlos, pero sus interiores se renovaron completamente para brindar confort y calidez.
Su dueño es amante del arte y de la arquitectura, ¡y eso se nota! En cada rincón hay una obra de algún reconocido artista norteño.
Como el clima de Cachi es extremo -con sol intenso durante el día y muy frío de noche-, se diseñaron diferentes espacios con mucho charme para disfrutar los distintos momentos, ya sea en el patio, en un living interno o en el jardín de atrás junto al fogón.
Los colores, olores, sabores y texturas acompañan esta experiencia e invitan a vivir momentos de relax y contemplación unidos al arte.
Si pueden, elijan la master suite: una habitación con terraza privada y reposeras que mira hacia los tejados del pueblo y el nevado de Cachi. Un maravilloso entorno para descansar, escribir o simplemente contemplar el paisaje.
Dato importante: no se recibe niños menores de 12 años.
El hotel cuenta con su propio restaurante, Catalino, que ofrece comida gourmet andina y está abierto todos los días.
Servicios
- 15 habitaciones entre estándar y suites.
- Restaurante.
- Bar.
- Room service.
- Estacionamiento.
- Lavandería.
- Wifi.
Lo que nos encantó
- Cada detalle del hotel está pensado para brindar calidez: sus patios, terrazas y livings invitan a sentarse a contemplar el cielo azul, leer un libro o por qué no a escribir.
- La atención de su personal es excelente.
- Las suites con terraza propia, que mira al nevado y los tejados del pueblo, son el lugar ideal para descansar y desconectarse del ajetreo diario.
- El hotel está ubicado a unas pocas cuadras de la plaza central: ideal para caminar sus calles, disfrutar de los cafés que la rodean y desconectarse del ajetreo diario.